UN TOQUE DE ENELDO

                                 

                    

En 1915, el joven Armenak huyó de Constantinopla con su hermano Aram (que viajaría a los E.U. y nunca más se supo de él…). El ejército turco acababa de matar a toda su familia. Armenak, después de muchas penurias llegó a Amsterdam. Se casó, se hizo joyero (fue uno de los encargados de tasar las joyas del Zar de Rusia, pero eso es otra historia…), consiguió una gran fortuna en Paris, conoció a Aznavour cuando aún era un refugiado armenio y que en los coros no le querían por su peculiar voz rasgada (hay que ver que poco visión de futuro tienen algunos...), tuvo descendencia y por fin, llegó a Madrid para que sus hijos se casaran con españolas.
Hay mucha historia y anécdotas que contar, pero eso será más adelante con otras recetas, si me lo permitís. Ésta receta es una de las que la abuela Yermoné, mujer de Armenak, trajo a España. Era la bisabuela de mis hijas, la abuela de mi marido.
Este plato se llama pasta con “tereot”. 

El tereot en armenio es eneldo. Se puede hacer con cualquier tipo de pasta. Una vez la pasta cocida al dente, se baten 2 huevos con 300 ml de nata o leche y se le añade eneldo. Sal y pimienta. Se mezcla todo y al horno. 

¡¡Las biznietas de Armenak se vuelven locas con este plato!!